Saturday, June 09, 2007

ENAJENACIÓN O SOLIDARIDAD

ENAJENACIÓN O SOLIDARIDAD
2007-06-08.
Asdrubal Caner-Camejo

"El hombre que no es capaz de luchar por la libertad, no es un hombre,
es un siervo" Georg Wilhelm Friedrich Hegel

No fueron Hegel ni Marx los creadores del concepto de enajenación o
alienación (del latín alienus: ajeno, extraño). Aparece como un vocablo
jurídico primero. Se usa en la traducción latina de la Biblia y luego,
la filosofía alemana le insufla un sentido sociológico y filosófico.
Desde Platón es conocido el término.

Pero no es mi intención hacer la historia del concepto. Para mí es un
asunto práctico y mucho más terrenal. Se trata de las posiciones de las
democracias actuales –sobre todo en América y Europa– con respecto a la
dictadura totalitaria en Cuba desde 1959 y la falta de una solidaridad
mundial para con el pueblo de Cuba.

Ante todo, quiero explicarme por qué esos países democráticos, no
lograron crear un frente común para extirpar el castrismo y salvar al
pueblo de Cuba, de 50 años de destrucción, angustias, pobrezas y
sufrimientos. Las explicaciones que me doy, las voy a resumir en varios
aspectos y luego haré algunas fundamentaciones.

1.- Las simpatías iniciales que creó la Revolución Cubana y la
manipulación castrista de presentarlo todo como una confrontación
EE.UU.-Cuba.

2.- La escasa simpatía por el papel hegemónico de EE.UU. en el mundo y
los recelos por sus políticas y sus éxitos económicos y tecnológicos.

3.- El apoyo económico, financiero, político y militar del bloque
soviético a Cuba, en medio de la Guerra Fría.

4.- La política de F. Castro de aliarse y apoyar a los países de Asia y
África en su lucha por la independencia y la liberación nacional.

5.- Tanto Europa como Canadá tenían sus propios intereses económicos y
políticos, que los separaban de los EE.UU. Era una forma de romper la
hegemonía norteamericana.
6.- La incapacidad del exilio cubano de sobreponerse al barraje de
propaganda y mentiras del castrismo sobre él, así como sus posiciones
violentas frente al régimen comunista en sus país.

7.- América Latina se quitaba a Cuba como un competidor de mucho poder
en el terreno económico y de competencia con el mercado americano y de
Europa.

8.- Los propios errores de la política de EE.UU. hacia Cuba.

Trataré de fundamentar brevemente estos puntos. Veamos:

Lo primero que hizo F. Castro –como he explicado en otros artículos– fue
convertir a los Estados Unidos, en el "Enemigo" y nacionalizar sus
propiedades y bienes sin ninguna compensación. Inmediatamente después,
se alineó con la URSS, a través de su encuentro en la ONU con Nikita
Khrushchev y la visita de A. Mikoyan a Cuba en febrero de 1960.

La reacción de EE:UU ante el gobierno castrista no se hizo esperar.
Evidentemente, Cuba constituía una enorme amenaza para la seguridad de
los EE:UU, América Latina y para el hemisferio occidental, tal como se
demostró con la instalación de los cohetes nucleares soviéticos en la
isla, que llevó al mundo al borde de una catástrofe nuclear en octubre
de 1962.

Se produce la invasión de Bahía de Cochinos e inmediatamente, Fidel
Castro declara el carácter marxista de su Revolución. Desde 1959, Cuba
comenzó el apoyo político y material a los movimientos guerrilleros en
América Latina: Venezuela, Perú, Guatemala, El Salvador, Brasil,
Argentina y otros países.

Por ello, la Asamblea General de la OEA, toma la decisión de excluir a
Cuba de ese cuerpo democrático de naciones, evidentemente, bajo la
presión de Estados Unidos. Argentina, Brasil, Bolivia, Ecuador, Chile y
México se abstuvieron. Las razones que invocaron estos países, radicó en
el hecho de que la expulsión o exclusión no se contemplaba en la Carta
de la OEA.

En 1964, a petición de Venezuela –por el apoyo de Castro a las guerillas
del "Comandante Douglas" – se aprueba una resolución de rompimiento de
las relaciones diplomáticas
En la IX Reunión de Consulta en 1964 se resolvió entre otras medidas el
aplicar sanciones económicas, el cese de todo transporte marítimo y el
rompimiento de relaciones diplomáticas y consulares.

Los únicos países que restaban a esas alturas de romper relaciones
diplomáticas eran Bolivia, Chile y Uruguay, quienes acataron la
resolución. México votó en contra y se convirtió en el único país
latinoamericano que mantiene relaciones oficiales con el gobierno de
Fidel Castro hasta el presente.

Lo que no logró Estados Unidos y América Latina, fue incorporar a
Europa, Africa, Asia y Canadá ha esta ruptura tan necesaria para los
intereses del pueblo cubano.

Fidel Castro logró que todo el proceso de desarticulación de la
democracia, la eliminación de las libertades civiles y políticas, los
fusilamientos y asesinatos políticos, la destrucción de la sociedad
civil, pasara desapercibido, como resultado del enfrentamiento EE:UU-Cuba.

Durante diez años, Fidel Castro logró que el mundo pusiera sus ojos en
esa confrontación bilateral, mientras él fulminaba a sangre y fuego a la
sociedad cubana.

Después de la II Guerra Mundial, los EE:UU emergieron como la única
potencia intacta del conflicto. Entre 1945 y 1960, ese país obtuvo
éxitos económicos y tecnológicos extraordinarios.
Su poder económico y comercial era – y aún lo es – objeto de celos de
Europa y en todo el mundo.

La presencia de la URSS y sus satélites, se vieron como una amenaza del
comunismo a la democracia occidental. Esa confrontación da lugar a la
Guerra Fría y al desarrollo de una carrera armamentista de temibles
consecuencias.

Por otra parte, hay una percepción generalizada de un comportamiento
arrogante, bélico y agresivo de EE:UU en la solución de los conflictos y
diferencias internacionales, que hacen que el mundo no siga el rumbo de
ese país.

A partir de la muerte de J. Stalin y del XX Congreso del PCUS y
bajo la dirección de N. Khrushchev, se produjeron pasos para aplacar las
tensiones internacionales. No obstante, la URSS continuó su camino de
extender la influencia comunista en cualquier parte del mundo. Fidel
Castro le dio esa oportunidad para entrar en América Latina.

Desde el encuentro en la ONU, los soviéticos jugaron a la carta cubana,
que se le ofrecía sin haberla esperado, para ampliar su presencia más
allá de los límites euroasiaticos. Era la oportunidad de entrar en el
traspatio de los Estados Unidos y establecer su condición de potencia
mundial, en competencia con el poder hegemónico del vecino del norte.

Desde 1962, le dieron subsidios, comercio, ayuda militar, precios
preferenciales y apoyos de todo tipo a la dictadura comunista cubana. A
cambio, recibieron la sumisión absoluta del dictador caribeño, que apoyó
sin reservas las líneas del PCUS en política exterior y le abrieron el
camino de influencia en los países del Tercer mundo.

Esto fue el basamento de las erroneas políticas económicas hasta 1972,
en que la URSS, cansada de gastar dinero para nada, presionan al
aventurero Comandante, para que cambie su postura. En 1973, Cuba entra
al CAME, y comienza una ofensiva diplomática en A. Latina, para romper
la estrategia de EE:UU de aislamiento.

Y funcionó, ante la indiferencia del mundo. Entre ese año y 1989, Cuba
logró establecer relaciones diplomáticas y comerciales, con la mayoría
de estados de las Américas.

En 1975, Cuba lanza miles de tropas en apoyo a Angola, que tuvo como
objetivos, destrozar la apertura hacia Cuba del Presidente Carter y
ampliar su base de sustento en el mundo. La guerra de Angola, le granjeo
a Cuba un extraordinario apoyo en los países del Tercer Mundo. Desde
1975 hasta 1989, Cuba jugó la carta africana, con el apoyo soviético,
con todo éxito.

En un mundo donde los intereses económicos y geopolíticos predominan,
las alianzas no son estables. Europa y Canadá, desde el principio,
vieron la posibilidad de abrir sus propios causes, sin la avasalladora
competencia norteamericana. Para Europa, era una entente contra el
dominio americano en Cuba. Para Canadá, era la forma de mostrar su real
independencia con su molesto vecino. Ambos jugaron sus cartas y ganaron.

El exilio cubano se enfrentó a fuerzas que no podía vencer. Aunque eran
ellos los más acérrimos estandarte de la libertad de nuestro país,
fueron derrotados por todas las causas que he explicado. Y la rabia y el
orgullo, el sufrimiento y el dolor, les llevaron a los caminos de las
armas y las salidas mas radicales.

El barraje de propaganda fascista de F. Castro, les convirtio en una
extrema derecha ligada a los intereses de EE:UU. Ellos han sido el
blanco predilecto de la izquierda y la izquierda fascista de casi todo
el mundo. Con todo eso en contra, el exilio no ha podido crear una marea
mundial de solidaridad con su causa. Es el primer exilio politico en el
mundo llamado democrático, que lo han dejado sin apoyo. Y es una
verdadera infamia en el hemisferio occidental.

Cuba, una pequeña isla en las Antillas, había tenido un éxito
extraordinario entre 1902 y 1959. Era uno de los tres países más
desarrollados de América. Siendo parte del Caribe y de A. Latina, Cuba
no se parecía a nadie. Cuba era otra cosa. Un ajiaco transcultural y
cosmopolita. Una rara mezcla de Europa, África y Estados Unidos. Su modo
de vida era americano y su cultura estaba entre Andalucía y Nigeria. Los
indicadores económicos, sociales y culturales, situaban a Cuba entre los
mejores del mundo. América Latina envidiaba a Cuba.

Cuando F. Castro tomó el poder, borró de un plumazo esa diferencia. Esa
fue la oportunidad del Caribe y A. Latina de enfrentar los retos de Cuba
en todos los sectores. Y la derrotaron. No puede haber solidaridad bajo
esas condiciones.

Finalmente, los graves errores de la política de EE:UU hacia Cuba, le
dieron el toque de gracia a las posibilidades de apoyo, a los
permanentes reclamos del pueblo cubano, para una ayuda imprescindible en
su liberación. Por eso, desde 1998, fecha del 50 aniversario de la
creación de la OEA, ese organismo está llamando a una reintegración de
Cuba al organismo continental. Según sus consejeros:

"Al término de la guerra fría la República de Cuba ha dejado de ser una
amenaza para el Sistema Interamericano, resultando de mayor provecho
para los países del hemisferio, el dar pasos concretos hacia su
reintegración en vez de preservar políticas de aislamiento".

Al cumplir la Organización de Estados Americanos 50 años de su
fundación, la coyuntura resulta propicia para la reincorporación de Cuba
mediante un diálogo constructivo que corresponda a una nueva etapa de
las relaciones interamericanas al comenzar el siglo XXI. (Consejero
Víctor M. Treviño "Futuro de Cuba dentro del Sistema Interamericano…" )

Los intereses mezquinos del hombre, cercenan su moral y su perspectiva
del futuro. La enajenación de la libertad de un pueblo, no es un tema a
discutir entre esa abrumadora trama de intereses.

La solidaridad se impone con inteligencia. No se mendiga ante los
poderosos. Estamos ante un mundo sin ética y sin destino. Este es el
mundo de Niesche, que pensó el dolor como un elemento esencial de la
vida, que no hay que rechazar.

Yo solo pido, que la inteligencia, la compasión y el desinteres, nos
acompañe, en esta marcha solitaria hacia la libertad y el futuro. Y
saber perdonar. Eso nos hará una nación fuera de serie.

Asdrúbal Caner Camejo, Representante del PSC en Canadá.

http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=10421

No comments: